La cuadragésimo novena edición del Rallye de Avilés Histórico se ha convertido en un evento memorable para los aficionados al automovilismo, especialmente para los seguidores de la pareja gallega Javier e Iván Bouza. Estos pilotos, representando a la Escudería Siroco Narón, lograron una actuación sobresaliente al imponerse en seis de las ocho especiales, consolidando así su segunda victoria consecutiva de la temporada. Este triunfo no solo destaca su habilidad al volante, sino también su estrategia y trabajo en equipo, elementos clave en el mundo del rally.
### Un Inicio Impecable
Desde el primer tramo, que tuvo lugar en Serín-Tamón, Javier e Iván Bouza demostraron su dominio al registrar el mejor tiempo con su Ford Escort MKII. Este inicio fulgurante les permitió colocarse en la primera posición, una ventaja que mantuvieron a lo largo de toda la competencia. La pareja gallega no solo se destacó por su velocidad, sino también por su capacidad para adaptarse a las condiciones cambiantes del rally, lo que les permitió sortear los desafíos que se presentaron en el camino.
A pesar de su dominio, no todo fue sencillo. En el primer paso por Solís-Llanera, la victoria fue para los asturianos Cele Foncueva y David de la Puente, quienes pilotaron un BMW M3 y terminaron en la quinta posición general. Sin embargo, esto no desanimó a los Bouza, quienes continuaron su camino hacia la victoria, mostrando una consistencia que les ha caracterizado a lo largo de su carrera.
El rally se desarrolló en un ambiente de intensa competencia, donde cada piloto luchaba por obtener el mejor tiempo en cada especial. La especial final, Grado-La Mortera, fue ganada por el gallego Francisco López y el avilesino Álvaro Menéndez, quienes lograron asegurar la segunda posición general, pero a una distancia considerable de los Bouza, que terminaron con un tiempo total que les otorgó una ventaja de 38,6 segundos.
### Un Podio Lleno de Talento
El podio del Rallye de Avilés no solo fue un reflejo del talento de los Bouza, sino también de la diversidad de competidores que participaron. Los grancanarios Toni Afonso y Jonay Miranda, con su Mitsubishi Lancer Evo V, completaron el podio absoluto, quedando a solo 19,9 segundos de la segunda posición. Su desempeño en la categoría Pre2000 fue notable, lo que demuestra que la competencia en el rally no solo se limita a los vehículos históricos, sino que también incluye a los modelos más recientes.
En la categoría Classic, el avilesino Daniel Alonso y el gallego Sergio Fernández se llevaron el triunfo con un Ford Escort MKII, destacándose como el equipo más rápido de esta edición. Su victoria en el apartado autonómico fue un testimonio de su experiencia y habilidad, ya que completaron las ocho especiales con un tiempo un minuto inferior al de los Bouza. Esta categoría, que atrae a muchos entusiastas del automovilismo, mostró una vez más la rica tradición del rally en la región.
La competencia de regularidad también tuvo su momento estelar, con un emocionante final que se resolvió en el último tramo. Los asturianos Francisco Martínez Ruisanchez y José Manuel Villamayor, actuales campeones nacionales, lograron una victoria reñida en la modalidad Sport, superando a los hermanos Carbonell, quienes también mostraron un gran desempeño durante toda la prueba. Este tipo de competiciones resalta la importancia de la precisión y la estrategia, elementos que son tan cruciales como la velocidad en el mundo del rally.
Durante la ceremonia de entrega de premios, que se llevó a cabo en la emblemática Plaza de España, la Escudería Avilesina rindió homenaje a Salva Belzunces, una figura icónica del automovilismo asturiano que dejó una huella imborrable en la historia del rally. Su legado continúa inspirando a nuevas generaciones de pilotos y aficionados, recordando la importancia de la pasión y la dedicación en este deporte.
El Rallye de Avilés Histórico no solo es una prueba de velocidad y habilidad, sino también una celebración de la cultura automovilística de la región. Con cada edición, se reafirma como un evento clave en el calendario de competiciones de rally en España, atrayendo a participantes y espectadores de diversas partes del país. La actuación de Javier e Iván Bouza es un claro ejemplo de cómo la dedicación y el trabajo en equipo pueden llevar a la victoria, y su nombre quedará grabado en la historia de este prestigioso rally.