La reciente visita de los Reyes de España a China ha marcado un hito en las relaciones diplomáticas entre ambos países. En una cena de gala celebrada en el Gran Palacio del Pueblo en Pekín, el presidente chino, Xi Jinping, y el Rey Felipe VI intercambiaron palabras que reflejan un deseo mutuo de fortalecer la cooperación y la amistad. Este encuentro no solo simboliza el respeto y la admiración entre dos naciones con profundas raíces culturales, sino que también abre la puerta a nuevas oportunidades económicas y sociales.
La cena, que tuvo lugar en un ambiente de gran solemnidad, fue un momento clave para que ambos líderes abordaran temas de interés común, como el comercio, el turismo y la colaboración en áreas como la innovación y la sostenibilidad. Felipe VI, en su discurso, enfatizó la importancia de la voz y el compromiso de China en el contexto internacional actual, donde los desafíos son cada vez más complejos y requieren de una cooperación efectiva entre naciones.
### La Historia Compartida entre España y China
La relación entre España y China se remonta a varias décadas, con un intercambio cultural y comercial que ha evolucionado significativamente desde el establecimiento de relaciones diplomáticas en 1978. Felipe VI recordó la visita de los Reyes Juan Carlos y Sofía, así como la inauguración del Instituto Cervantes en Pekín en 2006, como hitos que han cimentado esta amistad. En su discurso, el Rey destacó que han sido años de «construcción paciente» y de respeto mutuo entre dos civilizaciones que, aunque distantes geográficamente, comparten valores y tradiciones.
Uno de los aspectos más destacados de esta relación es el comercio. En 2024, el intercambio comercial entre ambos países superó los 50.000 millones de euros, consolidando a China como el principal socio comercial de España fuera de la Unión Europea. Sin embargo, este intercambio presenta un desequilibrio, ya que las exportaciones chinas a España son significativamente mayores que las españolas a China. A pesar de esto, la presencia de inversiones chinas en sectores como las energías renovables y los vehículos eléctricos es un signo positivo de la creciente interdependencia económica.
El turismo también ha sido un pilar fundamental en la relación bilateral. En 2024, cerca de 650.000 turistas chinos visitaron España, atraídos por su rica gastronomía, patrimonio cultural y clima mediterráneo. Este flujo de visitantes no solo beneficia a la economía española, sino que también fomenta un mayor entendimiento cultural entre ambos pueblos.
### Un Futuro de Cooperación y Desarrollo
El mensaje central del discurso de Felipe VI fue la necesidad de mirar hacia el futuro con optimismo y determinación. En un mundo marcado por tensiones geopolíticas y desafíos globales, el Rey abogó por el multilateralismo y la cooperación internacional. «No olvidemos las duras lecciones del siglo XX. No abandonemos jamás la búsqueda de la concordia», afirmó, subrayando la importancia de trabajar juntos para enfrentar problemas comunes como el cambio climático, la seguridad y el desarrollo sostenible.
Xi Jinping, por su parte, también destacó la relevancia de la amistad entre España y China, señalando que el 20º aniversario de la Asociación Estratégica Integral abre una nueva etapa de cooperación. En su intervención, el presidente chino agradeció los esfuerzos de la familia real española para fortalecer los lazos entre ambos países y expresó su convicción de que esta amistad será duradera y beneficiosa para ambos pueblos.
El banquete que siguió a los discursos fue un reflejo del refinamiento cultural de China, con un menú que incluyó platos emblemáticos como el pato laqueado de Pekín y langosta frita. Este tipo de intercambios culturales, que van más allá de la política y la economía, son fundamentales para construir puentes entre las naciones y fomentar un entendimiento más profundo.
La visita de los Reyes a China no solo ha sido un evento diplomático, sino también una oportunidad para reafirmar el compromiso de ambos países hacia un futuro de colaboración y respeto mutuo. Con la mirada puesta en los próximos años, España y China están en una posición privilegiada para explorar nuevas áreas de cooperación que beneficien a sus ciudadanos y fortalezcan su relación en el contexto global.
