La historia de Zara, una de las marcas más icónicas del mundo de la moda, comienza en un modesto local de A Coruña, donde tres jóvenes dependientas se convirtieron en testigos y protagonistas de un fenómeno que transformaría la industria textil global. Elizabeth González, Menchu Penas y Mariví Martínez, quienes empezaron a trabajar en la primera tienda de Zara en la calle Juan Flórez, comparten sus recuerdos de aquellos días que marcaron el inicio de un imperio.
### Un Comienzo Humilde
El 9 de mayo de 1975, A Coruña vio nacer a Zara, un proyecto impulsado por Amancio Ortega y Rosalía Mera. En un local que anteriormente había sido un garaje, se abrió la primera tienda que, aunque pequeña, sentó las bases para lo que hoy es Inditex, el gigante del retail. Elizabeth, quien tenía solo 15 años, recuerda cómo entró a la tienda buscando una camiseta y salió con un trabajo. «Fui a por una camiseta y me quedé 50 años trabajando en Zara», comenta con una mezcla de nostalgia y orgullo.
Las primeras dependientas se enfrentaron a un entorno de trabajo que combinaba la esencia de un bazar textil con la elegancia de una boutique. «Vendíamos sábanas, toallas, ropa interior, batas, pañuelos, telas por metros, camisas, zapatos…», recuerda Elizabeth. La tienda ofrecía productos variados y asequibles, lo que la convirtió en un lugar de referencia para la clientela local. Menchu, quien también comenzó a trabajar a los 15 años, destaca que el ambiente era muy diferente al de hoy: «La clientela era más humilde, gente trabajadora que buscaba calidad a buen precio».
La visión comercial de Amancio Ortega fue clave para el éxito de la tienda. Ortega, que en ese entonces era un empresario relativamente desconocido, tenía un talento innato para identificar tendencias y adaptarlas al mercado local. «Él viajaba, veía lo que se llevaba en otras partes y lo reproducía aquí a un precio muchísimo más bajo», explica Menchu. Esta estrategia permitió que Zara se convirtiera en un referente de moda accesible, atrayendo a un público diverso.
### Recuerdos de una Era Dorada
Las anécdotas de las primeras dependientas son un testimonio del arduo trabajo y la dedicación que caracterizaban a la tienda en sus inicios. Mariví, quien también se unió al equipo a los 15 años, recuerda cómo la tienda estaba llena de batas y pijamas, y cómo tenían que cortar las telas de manera improvisada. «Mi primer sueldo fueron unas 1.700 pesetas (alrededor de 10 euros)», dice con una sonrisa, recordando que estuvo 35 años en la tienda de Juan Flórez.
Las rebajas eran un evento que atraía a multitudes. «En las rebajas, la tienda se llenaba tanto que no podíamos ni movernos. Nos gritábamos entre nosotras para ver dónde estábamos», recuerda Mariví. Esta locura de ventas era parte del encanto de la tienda, donde la cercanía con los clientes era fundamental. Las dependientas incluso permitían que las clientas se llevaran la ropa a casa para probarla, anotando en una libreta lo que cada una elegía. Sin embargo, esta práctica tuvo que ser eliminada debido a los robos.
La figura de Amancio Ortega en esos primeros años era la de un jefe cercano y accesible. «Venía tienda por tienda y se quedaba a hablar contigo un rato. Te preguntaba cómo estabas, cómo estaba tu familia», recuerda Elizabeth. Esta cercanía no solo generó un ambiente de trabajo positivo, sino que también ayudó a construir una cultura empresarial sólida que perdura hasta hoy.
A medida que Zara creció, también lo hicieron las oportunidades para sus empleadas. Elizabeth, Menchu y Mariví, tras décadas de trabajo, se prejubilaron con orgullo, habiendo sido parte de un viaje que comenzó con una simple camiseta. Aunque la tienda original ya no vende batas ni telas al peso, sigue siendo un símbolo de los humildes comienzos de un imperio que hoy cuenta con más de 5,000 tiendas en todo el mundo.
La historia de Zara es un recordatorio de cómo un pequeño sueño puede convertirse en un fenómeno global, gracias al esfuerzo y la dedicación de aquellos que creyeron en él desde el principio. Las primeras dependientas no solo fueron parte de la historia de Zara, sino que también contribuyeron a redefinir la moda y el retail a nivel mundial.