La temporada de la Ópera de Oviedo ha comenzado con gran entusiasmo, destacando la reciente producción de ‘Hänsel y Gretel’, que ha recibido elogios tanto de críticos como de la audiencia. En una charla en el Aula de Cultura de Avilés, el director de la ópera, Celestino Varela, junto a otros miembros del equipo, compartieron sus visiones sobre la programación y la importancia de la producción propia en el mundo operístico.
Celestino Varela, quien lidera la dirección de la ópera, enfatizó la necesidad de adaptar la oferta a los gustos del público local, al mismo tiempo que se busca innovar. «Hay que saber en qué ciudad estás, los gustos, hay que probar cosas nuevas y también procurar que haya un equilibrio en la taquilla», comentó Varela. Esta filosofía se traduce en la selección de cinco títulos que componen la temporada, los cuales él describe como un «cóctel» que mezcla diferentes estilos y enfoques.
Uno de los aspectos más destacados de la temporada es la apuesta por producciones propias. Varela explicó que, tras la pandemia de COVID-19, se planteó la posibilidad de crear obras originales y dar oportunidades a nuevos talentos, como el director de escena Raúl Vázquez. Esta estrategia no solo enriquece la oferta cultural, sino que también permite a la ópera obtener rentabilidad. Un ejemplo de esto es ‘Romeo y Julieta’, una coproducción con ABAO Bilbao Ópera que ha tenido éxito tanto en España como en Italia, donde ya ha sido alquilada.
Raúl Vázquez, quien se encarga de la dirección escénica, compartió su enfoque creativo, que se basa en su instinto y emociones, evitando referencias a producciones anteriores. Vázquez, con una formación en cine, busca que cada elemento en escena cuente una historia, eligiendo solo aquellos que aportan al relato. Su visión es clara: «No elijo elementos bonitos superfluos, sino solo los que cuenten algo».
Por otro lado, Rubén Díez, director de orquesta de ‘Carmen’, habló sobre la elección de la versión original de la obra de Bizet. Aunque la ópera no tuvo una buena acogida en su estreno debido a sus elementos recitativos, Díez y su equipo han decidido regresar a esta versión primigenia, buscando ofrecer una experiencia más auténtica y fiel a la intención del compositor.
La Ópera de Oviedo no solo se centra en la producción de obras clásicas, sino que también busca innovar y atraer a un público diverso. La combinación de títulos conocidos con producciones originales es una estrategia que parece estar dando frutos, y los responsables de la ópera están comprometidos con continuar en esta línea.
El Aula de Cultura de Avilés también se convierte en un espacio para el intercambio de ideas y la difusión del conocimiento. En una próxima conferencia, el arqueólogo Iván Muñiz presentará su trabajo sobre el monasterio de Valdediós, en el marco del Proyecto Cisterland, que explora la arqueología medieval en Asturias. Este tipo de eventos complementa la oferta cultural de la región, promoviendo un diálogo entre diferentes disciplinas.
La temporada de la Ópera de Oviedo se presenta como una oportunidad para disfrutar de una variedad de propuestas artísticas que buscan no solo entretener, sino también educar y enriquecer la cultura local. Con un enfoque en la producción propia y la innovación, la ópera se posiciona como un referente en el panorama cultural de Asturias, invitando a todos a sumergirse en el fascinante mundo de la música y la escena operística.