La situación del mundo rural en España ha cobrado una relevancia significativa en el contexto político actual, especialmente tras la devastación provocada por los incendios forestales que han arrasado más de 400 hectáreas en diversas regiones del país. Ante este escenario, Izquierda Unida (IU) ha decidido poner en el centro de su agenda las necesidades del sector agrario, buscando así no solo responder a las demandas de los agricultores y ganaderos, sino también disputarle a Vox la representación de este importante colectivo. Antonio Maíllo, coordinador federal de IU, ha convocado una reunión para el 1 de septiembre con la Comisión Colegiada del partido, donde se abordarán las políticas agrarias y se presentarán propuestas concretas para mejorar la situación del campo español.
La propuesta de IU incluye la recuperación de un «plan de trabajo garantizado» que se presentó en 2015, el cual tenía como objetivo la creación de un millón de empleos públicos en actividades socialmente útiles. Este plan se centraba en la protección del medio ambiente y la reforestación, así como en la gestión de residuos y el cuidado de espacios naturales. En el contexto actual, donde los incendios han puesto de manifiesto la fragilidad de los ecosistemas rurales, la reactivación de estas iniciativas cobra una nueva dimensión. IU busca garantizar que estas labores se realicen a través de medios públicos, lo que no solo contribuiría a la creación de empleo, sino que también ayudaría a mitigar el impacto de futuras catástrofes ambientales.
### La Competencia Política en el Sector Agrario
La estrategia de IU no solo se centra en la propuesta de políticas agrarias, sino que también implica una crítica directa a la gestión de Vox en el ámbito rural. La formación de extrema derecha ha intentado capitalizar el descontento del sector agrario, especialmente tras los recientes incendios. Sin embargo, desde IU se cuestiona la capacidad de Vox para representar verdaderamente los intereses del campo, dado su apoyo a políticas que podrían perjudicar a los agricultores, como las amenazas de aranceles por parte de figuras como Donald Trump.
Maíllo y su equipo están conscientes de que la competencia por el voto rural es intensa y que Vox no se detendrá en su intento de atraer a este electorado. Por ello, IU ha estado trabajando en fortalecer sus alianzas con organizaciones y cooperativas agrarias que se distancian de la extrema derecha. La idea es presentar a IU como la verdadera voz del campo, capaz de ofrecer soluciones efectivas y sostenibles a los problemas que enfrenta el sector.
Además, la formación de izquierdas ha logrado un notable crecimiento en el ámbito municipal, con casi 1.700 concejales en todo el país tras las elecciones municipales de 2023. Este respaldo en las urnas les otorga una plataforma sólida desde la cual impulsar sus propuestas y reivindicaciones. IU tiene una especial influencia en zonas rurales vinculadas a la industria agropecuaria y en áreas de montaña que han sido históricamente afectadas por la minería, como Villablino, Fabero y Zamora, que también han sufrido las consecuencias de los incendios.
### La Reivindicación de la Gestión Pública
Uno de los puntos centrales de la agenda de IU es la reivindicación de que la gestión forestal y de emergencias esté en manos públicas. Esta postura se alinea con la crítica a la gestión del Partido Popular (PP) y su falta de acción efectiva ante la crisis de incendios. En este sentido, Maíllo ha manifestado que la prevención de incendios debería haberse abordado durante el invierno, cuando se deben realizar los trabajos de mantenimiento necesarios para proteger los bosques y el entorno rural.
La presencia de un ministro de IU en el Gobierno y su participación en el grupo parlamentario de Sumar les permite tener una voz activa en la política nacional, lo que podría traducirse en una mayor visibilidad para sus propuestas. La reciente participación de Yolanda Díaz en manifestaciones en Galicia, donde criticó la gestión del PP y abogó por una mayor intervención pública en la gestión forestal, refuerza esta línea de acción.
En este contexto, la estrategia de IU se presenta como una respuesta integral a las necesidades del mundo rural, buscando no solo paliar los efectos inmediatos de la crisis, sino también establecer un modelo de desarrollo sostenible que garantice la protección del medio ambiente y la creación de empleo en el sector agrario. La disputa por la representación del campo entre IU y Vox se intensificará en los próximos meses, y será fundamental observar cómo se desarrollan estas dinámicas en el nuevo curso político.