El Ibex 35 ha comenzado la jornada del lunes con un ligero aumento del 0,22%, alcanzando los 15.384,2 puntos. Este ascenso se produce en un contexto favorable tras las recientes mejoras en la calificación crediticia de España por parte de las agencias Moody’s y Fitch. Esta noticia se suma a la decisión de S&P, que hace dos semanas elevó la calificación del país a ‘A+’ con perspectiva estable, marcando un cambio significativo tras seis años sin alteraciones en su rating.
La mejora en el rating soberano es un indicativo de la confianza de los inversores en la economía española, lo que podría traducirse en un aumento de la inversión extranjera y un fortalecimiento del mercado laboral. En el ámbito macroeconómico, el Índice de Precios de Consumo (IPC) ha mostrado un incremento interanual de dos décimas en septiembre, alcanzando el 2,9%, el nivel más alto desde febrero. Este aumento se debe principalmente a la menor disminución de los precios de los carburantes y la electricidad en comparación con el mismo mes del año anterior.
En los primeros minutos de la sesión, las acciones de Solaria lideraron las ganancias con un aumento del 1,88%, seguidas por Indra con un 1,08%, Fluidra con un 0,71% y Mapfre con un avance del 0,65%. Sin embargo, no todas las empresas compartieron el mismo destino; Puig experimentó una caída del 2,36% en sus acciones, mientras que Telefónica vio un descenso del 0,64%.
Las principales bolsas europeas también mostraron un inicio positivo. En Frankfurt, el índice DAX subió un 0,31%, Londres un 0,26%, Milán un 0,09% y París un 0,07%. Este ambiente optimista en los mercados se ve respaldado por la estabilidad económica que se comienza a vislumbrar en la región.
En el mercado de materias primas, el precio del barril de crudo Brent, que es el referente para Europa, ha disminuido un 0,53%, situándose en 68,85 dólares. Por su parte, el West Texas Intermediate (WTI), que es el referente para Estados Unidos, bajó un 0,62%, alcanzando los 65,31 dólares. Este descenso en los precios del petróleo podría tener un impacto positivo en los costos de producción y, por ende, en la inflación a largo plazo.
En el ámbito de las divisas, el euro se cotiza a 1,1720 dólares, lo que refleja una ligera fortaleza de la moneda europea frente al dólar estadounidense. Además, el interés exigido por los bonos a 10 años ha disminuido hasta el 3,291%, lo que puede ser un indicativo de la confianza de los inversores en la estabilidad económica del país.
La combinación de un rating soberano mejorado, un IPC que, aunque en aumento, se mantiene en niveles manejables, y un entorno bursátil positivo, sugiere que el Ibex 35 podría continuar su trayectoria ascendente en las próximas sesiones. Sin embargo, los inversores deben estar atentos a los posibles cambios en la política económica y a los datos macroeconómicos que puedan influir en el mercado.
La situación actual del Ibex 35 es un reflejo de la recuperación económica que España está experimentando, aunque persisten desafíos que podrían afectar su crecimiento. La incertidumbre global, las tensiones geopolíticas y los cambios en las políticas monetarias de otros países son factores que los inversores deben considerar al evaluar el futuro del mercado español. A medida que se desarrollan los acontecimientos, será crucial observar cómo se comportan las acciones de las empresas más representativas del índice y cómo reaccionan a las noticias económicas tanto a nivel nacional como internacional.
