La reciente intención del BBVA de adquirir Banco Sabadell ha generado un ambiente de incertidumbre y tensión en el sector bancario español. A medida que se acercan las fechas clave para la aceptación de la oferta pública de adquisición (OPA), surgen nuevos obstáculos que podrían complicar el proceso. Este artículo examina los detalles de la situación actual, incluyendo el impacto de los dividendos y la evolución de la prima de la operación.
### Impacto de los Dividendos en la OPA
El anuncio de Banco Sabadell de comenzar a pagar un dividendo a cuenta de los resultados anuales en agosto ha sido un movimiento estratégico que afecta directamente la OPA del BBVA. Este dividendo, que se pagará el 29 de agosto, obligará al BBVA a ajustar la ecuación de canje de acciones en su oferta. Este ajuste es un procedimiento habitual en las OPAs, donde el pago de dividendos se considera una pérdida de valor para la entidad que está siendo adquirida.
Como resultado, la participación máxima que los accionistas de Sabadell podrían tener en el capital del BBVA se reducirá a aproximadamente el 13,73%, un descenso significativo desde el 16,17% inicial. Este cambio no solo afecta la percepción de la oferta, sino que también puede influir en la decisión de los accionistas de aceptar o rechazar la propuesta del BBVA. La ecuación de canje se ajustará de una acción nueva del BBVA más 0,7 euros en efectivo por cada 5,3456 acciones del Sabadell a una acción nueva más 0,7 euros por cada 5,5483 acciones del Sabadell. Aunque las condiciones económicas de la oferta inicial se mantendrán, la reducción en la participación de los accionistas podría desincentivar a algunos de ellos a aceptar la oferta.
### Evolución de la Prima de la OPA
Otro aspecto crucial en esta operación es la evolución de la prima ofrecida por el BBVA. Originalmente, la oferta valoraba a Banco Sabadell en un 30% por encima de su valor bursátil. Sin embargo, en las últimas semanas, el banco catalán ha visto un aumento en su cotización, cerrando con un 10,78% por encima del valor actual de la oferta del BBVA. Esto ha llevado a que los accionistas de Sabadell obtengan un rendimiento mayor al vender sus acciones en el mercado que al aceptar el canje propuesto por el BBVA.
Con la nueva ecuación de canje que se implementará a finales de agosto, la prima negativa podría incrementarse hasta un 14,98%. Este empeoramiento es más pronunciado que en ajustes anteriores, ya que no se prevé un aumento en la parte en efectivo de la oferta. El BBVA había añadido 0,7 euros en efectivo en ajustes anteriores para compensar a los accionistas de Sabadell por la pérdida de valor que implicaban los dividendos pagados a sus propios accionistas. Sin embargo, dado que el BBVA no tiene previsto pagar un dividendo adelantado en agosto, la situación se vuelve más complicada para la entidad vasca.
La presión sobre el BBVA para mejorar su oferta se intensifica a medida que se acerca el periodo de aceptación de la OPA. Los analistas del mercado anticipan que el BBVA podría verse obligado a elevar su propuesta si desea asegurar la aceptación de los accionistas de Sabadell. Sin embargo, cualquier mejora en el precio podría afectar negativamente el valor de las acciones del BBVA, lo que plantea un dilema para la entidad.
### Estrategias de los Bancos en la Contienda
Ambos bancos han prometido a sus accionistas una remuneración récord en los próximos ejercicios, lo que refleja la competencia feroz que existe entre ellos. Mientras que el BBVA busca asegurar la aceptación de su OPA, Banco Sabadell ha implementado estrategias para mantener a sus accionistas en su lado, prometiendo un total de 6.300 millones de euros en remuneraciones hasta 2027. Esta estrategia está diseñada para disuadir a los accionistas de aceptar la oferta del BBVA y mantener la independencia del banco catalán.
La situación se complica aún más por la incertidumbre en torno a la respuesta de los accionistas de Sabadell. Muchos de ellos, especialmente los minoristas, han expresado su rechazo a la oferta del BBVA, lo que podría influir en la decisión final de la entidad vasca. La falta de claridad sobre si el BBVA mejorará su oferta o desistirá de la OPA añade un nivel adicional de tensión a la situación.
En resumen, la OPA del BBVA sobre Banco Sabadell enfrenta múltiples desafíos que podrían determinar su éxito o fracaso. Con la presión creciente para mejorar la oferta y la incertidumbre en torno a la respuesta de los accionistas, el desenlace de esta contienda sigue siendo incierto. A medida que se acercan las fechas clave, tanto el BBVA como el Sabadell se preparan para una batalla que podría redefinir el panorama bancario en España.