La temporada de pesca del salmón en Asturias ha cerrado sus puertas con cifras alarmantes. A pesar de las expectativas iniciales, la campaña ha resultado ser un verdadero desastre, con solo 128 salmones capturados, una cifra que contrasta drásticamente con los 375 del año anterior. Este descenso en las capturas ha llevado a los pescadores a expresar su preocupación y a buscar respuestas sobre las causas de esta crisis.
### Un Año de Expectativas y Desilusión
La temporada de pesca del salmón en Asturias comenzó el 13 de abril con un optimismo palpable. Los pescadores esperaban una buena cosecha, impulsados por un buen estado de los ríos y ciclos vitales favorables para la especie. Sin embargo, al cierre de la temporada, el panorama es desolador. Enrique Berrocal, presidente de la Sociedad de Pescadores Las Mestas del Narcea, no duda en calificar la temporada como un desastre.
Los datos son contundentes: el río Narcea, que históricamente ha sido el más productivo, solo ha reportado 97 salmones, mientras que el Sella ha aportado 24 y el Cares apenas 7. El río Esva no ha registrado ninguna captura, y en el Eo, solo se han contabilizado dos salmones, ambos en la ribera gallega, lo que no cuenta para las estadísticas asturianas. Este descenso en las capturas no es un fenómeno aislado; se ha observado una tendencia decreciente en los últimos años, especialmente desde la pandemia, donde las cifras han caído de más de 800 ejemplares a poco más de un centenar.
La situación es alarmante y plantea la posibilidad de que el salmón pueda desaparecer de los ríos del Cantábrico si no se toman medidas urgentes. Berrocal señala que los problemas que enfrenta la especie son múltiples y complejos. Uno de los factores más preocupantes son los depredadores. Los cormoranes, que ya eran un problema conocido, ahora se ven acompañados por las lubinas, que están afectando gravemente a los esguines del salmón. La presencia de estos depredadores en los ríos ha llevado a Berrocal a pedir un control más efectivo de su población.
### Factores que Amenazan la Población de Salmones
Además de los depredadores, hay otros factores que están contribuyendo a la disminución de la población de salmones. La pesca en el mar es uno de ellos. Antón Caldevilla, otro destacado pescador, menciona que la pesca de salmones en el océano está mermando la población. A pesar de que ha habido desoves, los esguines que bajan a los ríos no están regresando en números suficientes, lo que pone en riesgo la continuidad de la especie.
El estado de los ríos también es un tema de preocupación. La calidad del hábitat es fundamental para la supervivencia del salmón, y muchos pescadores creen que es necesario realizar estudios científicos que evalúen si los ríos siguen siendo aptos para esta especie. Berrocal sugiere que se debe invitar a científicos independientes para que analicen la situación sin prejuicios.
El cambio climático es otro factor que no se puede ignorar. Las alteraciones en el clima pueden afectar los ciclos de vida del salmón y su capacidad para reproducirse. La combinación de todos estos factores crea un escenario preocupante para el futuro de la pesca del salmón en Asturias.
Los pescadores han hecho un llamado a las autoridades para que tomen medidas efectivas que aborden todos estos problemas. La situación actual no solo afecta a los pescadores, sino que también tiene implicaciones para el ecosistema en su conjunto. La desaparición del salmón podría tener un efecto dominó en la biodiversidad de los ríos asturianos.
La comunidad pesquera está unida en su preocupación y en su deseo de encontrar soluciones. La pesca del salmón no es solo una actividad recreativa; es una parte integral de la cultura y la economía local. Por lo tanto, es crucial que se implementen estrategias que aseguren la sostenibilidad de esta especie y, por ende, de la actividad pesquera en la región.
La temporada de pesca del salmón en Asturias ha sido un claro reflejo de los desafíos que enfrenta esta especie y la necesidad urgente de actuar. La combinación de factores como la depredación, la pesca en el mar, el estado de los ríos y el cambio climático requiere una atención inmediata. Los pescadores están dispuestos a colaborar con las autoridades y los científicos para encontrar soluciones que permitan recuperar la población de salmones y asegurar un futuro sostenible para la pesca en Asturias.