El presidente del BBVA, Carlos Torres, se encuentra en una etapa crucial en la que los accionistas del Banco Sabadell deben decidir si aceptan la oferta de compra (OPA) presentada por la entidad. Con la fecha límite acercándose, Torres expresa su confianza en que la aceptación superará el 50% del capital social del Sabadell, a pesar de los obstáculos que, según él, están siendo impuestos por la dirección del banco catalán. En este contexto, es fundamental analizar las implicaciones de esta OPA y los factores que podrían influir en su éxito.
**La Estrategia de BBVA y la Resistencia de Sabadell**
La OPA del BBVA ha sido presentada como una oportunidad atractiva para los accionistas del Sabadell, quienes podrían beneficiarse de un incremento significativo en el valor de sus acciones tras la fusión. Torres señala que, gracias a esta oferta, la cotización del Sabadell ha más que duplicado su valor desde el inicio del proceso. Sin embargo, el presidente del BBVA también ha denunciado que el Sabadell está poniendo «dificultades sistemáticas» para que sus accionistas acepten la oferta. Esta situación ha llevado a BBVA a solicitar la intervención de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para que se tomen medidas urgentes.
La resistencia del Sabadell a aceptar la OPA puede estar relacionada con la percepción de sus accionistas sobre el valor a largo plazo de la entidad en solitario. A pesar de que un tercio de los accionistas minoritarios que tienen sus acciones depositadas en BBVA han mostrado su intención de aceptar la oferta, el 80% de los minoritarios, que representan el 32% del capital, tienen sus acciones en el propio Sabadell y, según Torres, es probable que no acepten la oferta. Esto plantea un desafío significativo para el BBVA, ya que el éxito de la OPA depende en gran medida de la aceptación de estos accionistas.
**Perspectivas y Riesgos en el Proceso de OPA**
A medida que se acerca la fecha límite para la aceptación de la OPA, surgen preguntas sobre las estrategias que el BBVA podría adoptar si no logra alcanzar el umbral del 50% de aceptación. Torres ha mencionado que existe la posibilidad legal de reducir el umbral al 30%, aunque ha enfatizado que no es su intención hacerlo. Esta opción podría obligar al BBVA a lanzar una segunda OPA, pero a un precio que no sería superior al de la primera, lo que podría desincentivar a los accionistas a esperar.
La incertidumbre sobre el futuro de la OPA también se ve afectada por la interpretación de la CNMV sobre la legislación vigente. Torres ha manifestado su confianza en que la CNMV aclarará la situación, lo que podría influir en la decisión de los accionistas. Además, el presidente del BBVA ha destacado que la oferta actual es imbatible y que los accionistas del Sabadell tienen mucho que ganar al aceptar la OPA, ya que se beneficiarán de un incremento del beneficio por acción tras la fusión.
En el contexto de la OPA, es importante considerar las proyecciones de los analistas sobre el potencial de las acciones del Sabadell y del BBVA. Actualmente, los analistas otorgan un potencial del 4% a las acciones del Sabadell y del 3,7% al BBVA. Sin embargo, el precio de la OPA (3,375 euros) es ligeramente inferior al precio medio que los analistas han asignado al Sabadell (3,427 euros). Esto podría influir en la decisión de los accionistas, quienes podrían cuestionar si aceptar la oferta es la mejor opción en comparación con mantener sus acciones en el Sabadell.
La situación se complica aún más con la posibilidad de que una segunda OPA pueda afectar negativamente la cotización del BBVA. Torres ha afirmado que no hay razones para que la acción se vea perjudicada, dado que el banco tiene un proyecto sólido y ambicioso para el futuro. Sin embargo, la incertidumbre en torno a la OPA y las reacciones del mercado podrían generar volatilidad en las acciones de ambas entidades.
En resumen, la OPA del BBVA sobre el Banco Sabadell representa un momento decisivo en el sector bancario español. Con la fecha límite de aceptación acercándose, la atención se centra en cómo los accionistas del Sabadell responderán a la oferta y qué estrategias adoptará el BBVA en caso de no alcanzar el umbral deseado. La dinámica entre ambas entidades y la intervención de la CNMV serán factores clave en el desenlace de esta operación.