En el corazón de Asturias, un pequeño pueblo llamado Navelgas se erige como un destino ideal para quienes buscan una escapada familiar llena de magia y tradición. Este encantador rincón, ubicado en el concejo de Tineo, es conocido como el Valle del Oro, y ofrece una experiencia única que combina historia, naturaleza y gastronomía. A tan solo 100 kilómetros de Oviedo y a 25 de la costa, Navelgas se presenta como el lugar perfecto para disfrutar de unas vacaciones en Semana Santa.
### La Búsqueda del Oro: Una Aventura Familiar
Uno de los principales atractivos de Navelgas es el Museo del Oro de Asturias (MOA), donde tanto niños como adultos pueden sumergirse en la historia de la minería aurífera de la región. Este museo no solo es un espacio educativo, sino también un lugar donde la diversión y la aventura se entrelazan. Los más pequeños tienen la oportunidad de participar en talleres de bateo, donde aprenderán a buscar y separar pequeñas pepitas de oro del lecho del río. Esta actividad, que evoca las historias de exploradores y buscadores de tesoros, es una forma emocionante de conectar con la historia local.
Los talleres están diseñados para niños a partir de los 4 o 5 años y tienen una duración aproximada de 30 minutos. Durante este tiempo, los participantes no solo se divierten, sino que también aprenden sobre la rica herencia cultural de Navelgas, que resurgió en 1949 gracias a la creación de la “Sociedad Aurífera Asturiana”. Este verano, el pueblo será sede del Campeonato Mundial de Bateo de Oro 2025, que se llevará a cabo del 3 al 9 de agosto. Este evento incluirá una categoría familiar, permitiendo que grupos de entre tres y cinco miembros compitan y disfruten juntos de esta experiencia única.
### Gastronomía Asturiana: Sabores que Reconfortan
Después de una jornada de aventuras en busca de oro, es hora de sentarse a disfrutar de la deliciosa gastronomía asturiana. Navelgas ofrece una variedad de platos tradicionales que son un verdadero festín para los sentidos. Entre las delicias que se pueden degustar, destaca el potaje de berzas, un plato reconfortante que combina berza tierna, embutidos ahumados y un sabor que evoca la calidez del hogar. Otro plato emblemático es la fabada asturiana, elaborada con fabes locales y un compango que llena el aire con su aroma inconfundible.
Sin embargo, uno de los embutidos más representativos de la región es el chosco, un producto curado y ahumado que captura la esencia del occidente asturiano. Este manjar se puede disfrutar tanto en tapas como en platos principales, y es una de esas delicias que deja una huella imborrable en la memoria gustativa de quienes lo prueban.
Navelgas no solo es un lugar para disfrutar de la naturaleza y la historia, sino que también es un destino donde la gastronomía juega un papel fundamental en la experiencia. La cocina asturiana, con su enfoque en ingredientes frescos y recetas tradicionales, es un reflejo de la cultura local y una invitación a saborear lo auténtico.
### Un Viaje al Pasado en el Presente
Visitar Navelgas es más que simplemente conocer un nuevo lugar; es embarcarse en un viaje al pasado que se vive intensamente en el presente. Este pueblo, que parece detenido en el tiempo, ofrece un ambiente sereno donde cada rincón cuenta una historia. Desde sus paisajes naturales hasta sus tradiciones arraigadas, Navelgas es un destino que invita a los visitantes a desconectar de la rutina diaria y a disfrutar de lo simple.
Durante la Semana Santa, las familias pueden disfrutar de actividades al aire libre, explorar los senderos que rodean el pueblo y participar en eventos locales que celebran la cultura asturiana. La posibilidad de ensuciarse las manos en busca de oro, de compartir risas y momentos en familia, y de saborear platos tradicionales, convierte a Navelgas en un lugar donde los recuerdos se crean y se atesoran.
En un mundo donde las grandes distancias y los destinos turísticos masificados a menudo dominan, Navelgas se presenta como una joya escondida que invita a los viajeros a mirar con otros ojos. Aquí, las aventuras no requieren grandes desplazamientos, sino el deseo de descubrir lo que realmente importa: la conexión con la naturaleza, la historia y la familia. Sin duda, Navelgas es un destino que merece ser explorado y disfrutado en cada rincón.